Los alimentos frescos son la base de una alimentación sana. Por muy crujientes y apetitosas que sean las frutas y hortalizas que se compran en el puesto del mercado, hay que consumirlas lo antes posible. Pero, ¿quién puede comprar todos los días los ingredientes frescos para cocinar? Aparte de comprobar la calidad de los alimentos a la hora de la compra, es imprescindible almacenarlos correctamente. A la hora de prepararlos, su frescor, sabor y estado juegan un papel decisivo. En los cajones de los MasterCool se crea el clima ideal para almacenar los alimentos de manera cuidadosa. Gracias a la innovadora función MasterFresh, la temperatura de refrigeración es especialmente baja para que las vitaminas y los minerales se conserven durante mucho tiempo. Además, el nivel de humedad se ajusta a la perfección, tanto para frutas y verduras como para lácteos, pescado o carne. Esto mantiene los alimentos frescos el triple de tiempo.