El aparato solicita automáticamente que se vacíe el recipiente para posos cada 48 horas o cada 72 horas.
El vaciado impide que los restos de café se queden olvidados en la máquina y se favorezca la formación de moho.
Si el recipiente para posos se vacía cuando el aparato está desconectado, es posible que el aparato no registre este proceso.
En este caso se trata de una medida preventiva, por eso no requiere subsanación.
