Una silla de ruedas negra en una habitación para personas mayores
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Buurtzorg: ¿un modelo asistencial con futuro?

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En los Países Bajos, el concepto de atención de «asistencia vecinal» se implantó hace ya 15 años. Ahora la atención se centra una vez más en aquellos a quienes hay que cuidar y atender, en lugar de la burocracia y las regulaciones excesivas.
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A Jos de Blok a menudo se le llama revolucionario, el Steve Jobs de la asistencia a domicilio. Este holandés estudió Enfermería y estuvo al frente de un servicio de enfermería. Amaba su trabajo y el tiempo que podía pasar con personas mayores. Pero con el paso de los años, la atención cambió: cada vez más burocracia, horrendos aumentos de costes y una pérdida inaceptable de calidad. Sentarse al lado de la anciana, tomarle la mano y charlar con ella un rato ya no era posible. Y aquí es donde entra en juego el De Blok «revolucionario», porque separó la burocracia y la atención y volvió a poner a las personas en el centro.

La calidad de la asistencia mejora

Una enfermera sujeta las manos de una señora mayor sentada en una silla de ruedas.

Fundó el servicio Buurtzorg. Esto significa «asistencia vecinal». Los equipos, formados por una decena de empleados, se organizan y trabajan de forma independiente. Gestionan presupuestos, organizan sus giras y contratan compañeros.

En esencia, Buurtzorg consiste en una gran red de trabajadores. En otras palabras: personal de enfermería, médicos, terapeutas y, familiares. Todos entran en contacto a través de la plataforma digital «Buurtzorg-Web». Las necesidades de atención y apoyo de una persona se vuelven transparentes para todos. Y los equipos de Buurtzorg han cambiado algo crucial: ahora a las compañías de seguros médicos se les factura por horas. Esto significa que cada actividad vale lo mismo. Hasta entonces, la arraigada estructura de costes en los Países Bajos no incluía limpiar el polvo ni sacudir la cama. Estas actividades formaban parte del mantenimiento del hogar, no del cuidado profesional de un especialista. Todas esas actividades, que no estaban cubiertas, suponían una pérdida económica. Desde que se fundó «Asistencia vecinal» en 2007, cada cuidador o equipo ha podido decidir individualmente qué necesita la persona atendida y promover su independencia, ayudándole, por ejemplo, a ponerse los calcetines.

Equipos de Buurtzorg también en Alemania

La calidad de la asistencia a domicilio está aumentando, con una gran satisfacción entre las personas atendidas y el personal sanitario (Buurtzorg ha sido galardonado varias veces como mejor empleador de los Países Bajos). «Cada cuidador de Buurtzorg ahorra dos horas de trabajo en comparación con los cuidadores de servicios de asistencia convencionales», afirma de Blok. Obviamente, esto también beneficia a las compañías de seguros de salud. Buurtzorg tiene actualmente más de 15.000 empleados. Existen cooperaciones con 25 países. Ya existe también Buurtzorg Alemania. Pero muchos equipos de atención todavía están probando el sistema de asistencia vecinal. Dado su éxito, el modelo de Buurtzorg puede convertirse en el gran modelo de asistencia del futuro.

Este artículo forma parte de nuestra revista para clientes «PROconcept». Es posible descargar la versión digital de la revista.

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