Un cuidador habla con un residente en silla de ruedas

¿Qué es la calidad de vida?

La gente vive más y con mejor salud. Según la Organización Mundial de la Salud, cada vez hay más personas mayores de 60 años en Europa, y se prevé que esta cifra aumente hasta los 300 millones en 2050. Si bien esto es una buena noticia, ya que podemos pasar mucho más tiempo con nuestras familias y disfrutar de los placeres de la vida durante más tiempo que las generaciones anteriores, supone nuevos retos para el sector asistencial del futuro. Desde la creciente demanda de servicios sanitarios y apoyo social hasta la calandra de cuidadores y la escasez de plazas en residencias de ancianos, necesitamos formas de fomentar la independencia de la población que envejece. Al fin y al cabo, todos envejecemos y probablemente necesitaremos cuidados a lo largo de nuestra vida.

El sentido de la vida

Cuatro ancianos socializan mientras juegan a un juego de mesa

Para que las personas mayores sigan siendo independientes y lleven una vida más plena y saludable, cada vez se da más prioridad a la calidad de vida que a la longevidad. El significado del término «calidad de vida» se ha debatido con frecuencia en los últimos años. En su sentido más amplio, la calidad de vida se refiere al bienestar general, el confort y la satisfacción de un individuo o comunidad en diversos aspectos de la vida, incluidos factores físicos, psicológicos, sociales y ambientales. Una alta calidad de vida hace que merezca la pena vivir y nos da una razón para levantarnos cada mañana. Como una taza de café, nos da energía. Sin embargo, a medida que envejecemos, hay cosas que desgraciadamente ya no podemos hacer solos o sin ayuda. Como resultado, puede perderse la sensación de sentido. Por eso es importante dar prioridad a la calidad de vida de los residentes en residencias de ancianos y centros asistenciales, para que sigan motivados y lleven una vida plena.

La calidad de vida es individual

Dos ancianas cocinan juntas en una residencia de ancianos

La calidad de vida de cada persona depende de otros factores, como su estado general de salud, sus capacidades físicas, su bienestar mental y su dependencia de los demás, así como de otras influencias decisivas. Por lo tanto, son necesarios planteamientos individuales, que las residencias de ancianos y centros asistenciales deben integrar en planes personalizados. De este modo, se puede promover la calidad de vida de los residentes en función de sus necesidades específicas. Hay que tener en cuenta que la calidad de vida de una persona está muy individualizada, dependiendo de su capacidad para realizar tareas de forma independiente y del nivel de mantenimiento que requiera. Para las personas con problemas de movilidad, por ejemplo, se pueden hacer adaptaciones en la residencia de ancianos para que no hagan sobreesfuerzos ni se lesionen en la vida cotidiana, por ejemplo al levantarse, vestirse o ducharse. Por ejemplo, son útiles los asideros y soportes de movilidad en camas y duchas, así como la ropa adecuada. Ambient Assisted Living (AAL) también puede utilizarse para fomentar un entorno independiente en residencias de ancianos. AAL incluye tecnologías como aparatos inteligentes, redes de conexión inalámbrica, aplicaciones de software y sensores médicos, gracias a las cuales los residentes dependen mucho menos de los cuidadores. El AAL les permite realizar por sí mismos tareas menores, como encender y apagar la luz o la televisión, mientras el personal asistencial está disponible para tareas más importantes dentro de la residencia de ancianos. Con estas medidas y otras similares, los residentes pueden mantener su independencia. Un mayor sentido del propósito también mejora la calidad de vida. Un importante efecto secundario: se necesita menos personal de enfermería.

Sin embargo, la calidad de vida no sólo se basa en las necesidades de los residentes, sino también en las cosas que les proporcionan placer. La música, la cocina, la vida social, la lectura y los rompecabezas son sólo algunos ejemplos de actividades que pueden enriquecer la vida cotidiana y no deben descuidarse. Piense en las pequeñas cosas de la vida que le dan placer y piense cómo puede integrarlas en la vida cotidiana en las residencias de ancianos y centros asistenciales.

Agradecimiento a nuestros seres queridos

Las residencias de ancianos y centros asistenciales también disponen de otras medidas para mejorar la calidad de vida de sus residentes. La familia, los amigos y otros seres queridos son extremadamente importantes, ya que la soledad y el aislamiento social constituyen un grave problema para las personas mayores, que, según los estudios, puede provocar depresión y un aumento de las hospitalizaciones. La tecnología puede simplificar la comunicación de las personas con discapacidades físicas. Por ejemplo, los residentes pueden ponerse en contacto con sus familiares mediante videollamadas.

Protección de los residentes

Un cuidador habla con un residente en silla de ruedas

Un ámbito fundamental de la calidad de vida es la prevención de infecciones para que los residentes se mantengan lo más sanos posible. Desde la preparación higiénica de sus prendas hasta la limpieza a fondo de la cubertería y la vajilla, aquí los resultados de alta calidad son lo más importante. Los lavavajillas Freshwater, por ejemplo, cumplen las normas de higiene más estrictas y ofrecen seguridad a los residentes y al personal. Las soluciones de Miele Professional, como lavavajillas, lavadoras y secadoras, se han desarrollado especialmente para el sector asistencial y reducen el riesgo de enfermedades infecciosas, fomentan la salud general y garantizan un entorno seguro. Así lo confirman institutos independientes que ponen a prueba nuestros aparatos con regularidad. Con nuestras soluciones, usted va sobre seguro: para mantener la calidad de vida y dar prioridad a la Higiene.

La vista en el futuro

¿Cómo cambiará el mantenimiento en el futuro para garantizar los máximos niveles de calidad a los residentes? Cada día observamos nuevos avances en tecnología. Por ejemplo, se están desarrollando robots para acompañar a las personas mayores y ayudarlas en su vida cotidiana. Por ejemplo, facilitan el levantarse de la cama. Otras innovaciones digitales ya se han integrado en la vida cotidiana de residencias de ancianos y centros asistenciales, como la monitorización por sensores y las tecnologías portátiles de emergencia. La inteligencia artificial (IA) se está utilizando en proyectos piloto para prevenir caídas y hospitalizaciones. En el futuro, esta tecnología también podría beneficiar al personal de enfermería, ya que la IA puede optimizar los procesos de trabajo y proporcionar apoyo. En Miele Professional sabemos que la calidad de vida es un tema amplio y complejo. Desde la pandemia, la higiene en las residencias de ancianos ha cobrado aún más importancia y está estrechamente ligada a la calidad de vida. Por eso ayudamos a las residencias de ancianos con nuestras soluciones 360PRO a superar los retos y mantener los más altos niveles de higiene. De este modo, el personal asistencial puede concentrarse en lo realmente importante: ofrecer a los residentes la mejor calidad asistencial y permitirles llevar una vida feliz y sana.

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Fuentes:
  1. 1.
    Organización Mundial de la Salud – https://www.who.int/europe/health-topics/ageing/
  2. 2.
    The Health Foundation – https://www.health.org.uk/news-and-comment/news/older-people-living-alone-are-50-more-likely-to-visit-ae-than-those-who-live-with/
  3. 3.
    MIT Technology Review – https://www.technologyreview.com/2023/01/09/1065135/japan-automating-eldercare-robots/
  4. 4.
    The Telegraph – https://www.telegraph.co.uk/news/2023/11/14/ai-help-nhs-cut-winter-hospital-admissions/